jueves, 15 de diciembre de 2011

El puente de las Pelucas

Cualquiera que haya paseado por las calles del centro de Madrid en diciembre ha conocido la misantropía. Calles abarrotadas de consumidores felices, maniacos. Bolsas y paraguas, golpeando y arañando. Cortilandia, claustrofobia.

La semana del puente de la Constitución es todavía peor. Familias disfrazadas, con gorros y pelucas, desfilan por Sol y aledaños inclinados a comprar cuanta basura les ofrezca algún dealer del buen rollo callejero: Lengüetas que emiten el más desagradable  y estridente sonido que pueda captar el oído humano. Bolas magnéticas que chascan en el aire con el ruido sordo de un  huevo que se rompe. Sombreros de cabeza de reno que parecen zapatillas chafadas y te otorgan, automáticamente, el calificativo social de cocacolo.

El espíritu navideño pervive en estos gestos a modo de Poltergeist. Es divertido si pasa en casa de otros. Yo abogo por mantener la tradición de los christmas, y dejarse de experimentar con subproductos y cutreces. Por eso, os dejo colgado este dibujo, listo para imprimir, por si os apetece usarlo para acordaros de alguien en estas fechas. Haced click aquí para empaparos de mi júbilo.

Gorros y pelucas son muy efectivos para ocultar las cicatrices de las lobotomías tan profusamente realizadas en estas entrañables fechas.

jueves, 24 de noviembre de 2011

Disfraz de chaval

Ok. La realidad es que, hoy en día, después del paro y la crisis, la mayor preocupación de español medio es el parecer mayor.

El otro día me fijaba en el taitantos peterpanesco, sólo como excusa para hablar hoy de su reverso luminoso: el señor de "acrílico y elastán", y su look de superhéroe atemporal de la sección de saldos del Carrefour. Este corazón joven adopta la estrategia del camaléon melancólico para burlar el paso de los años: enfunda su cuerpo en los colores chillones y los materiales retrofuturistas de una juventud que nunca existió. Su estética fue diseñada específicamente como lugar idílico al que volver desde la madurez.

Sólo un humilde consejo de uno que no es inmune a toda esta basura de la edad: No pintéis el elefante de rosa. La procesión va por dentro. Alguien debería decir a estos señores que no hay nadie de espíritu más joven y más molón y de hoy que el abuelazo de Punset.




Aunque tú hayas decidido tratar de congelar el tiempo, la línea que separa la nostalgia del patetismo avanza a la par del mundo. McFly, no me seas Pink Floyd.


sábado, 12 de noviembre de 2011

Corazas de tela

Una de las cosas más divertidas de la vida es ver personas dejando patente que no tienen ni idea de lo que les rodea. Alguna gente hace de este desconocimiento su modo de vida. Hay quien, incluso, se vanagloria de ello.

Cerrar los ojos a lo que ocurre a tu alrededor no sólo te aísla y te deja en evidencia, sino que contraviene todas las leyes de la supervivencia humana y de la evolución animal.
















 Como si fuera un traje de los TEDAX, esta indumentaria te permite atravesar la realidad sin que ni un ápice de expresión cultural contemporánea penetre en tu interior.

viernes, 28 de octubre de 2011

Titanes de la fiesta

Las fiestas con invitación suelen ser un Greatest Hits de Fauna Mongola. Pero si voy a alguna, me engaño pensando que voy en misión antropológica, cuando en realidad voy a gorronear. Como todos, diréis. Pero no. La mayoría de la gente va a estas fiestas a ser vista. "No me pongas otra, esta noche estoy de servicio". Son siempre los mismos, y no sé si se divierten o no. Tengo una teoría: Sólo un reducido grupo de asiduos descerebrados llega a librarse de la presión social para disfrutar del eventoEs inquietante pensar que nadie ha visto nunca a ninguna de estas personas de día, fuera de estas fiestas. Nunca son los más estilosos, los más modernos o los más interesantes, pero a las 3 de la mañana matarías por haberles hecho caso cuando se te acercaron a las 11 a decirte no se qué de una puerta abierta.
El otro día estuve en Casa Jäger, que es un parque temático del "whatever" y del "¿os conocéis?", el Valhalla de los modernos. Me disponía a comprobar mi teoría. En el último autobús de vuelta descubrí con pavor que no recordaba mucho y mi libreta estaba en blanco. "Si la vida fuera una peli de M. Night Shyamalan, ahora descubriría que soy uno de estos tipos", pensé. Pero no. Al final resultaba que yo también estaba muerto. Desde el principio.

El 95% de vuestras madres se alegrará de veros salir en fotos abrazadas a un chaval sudado con una botella de agua mineral sin etiqueta. "Un chico deportista es siempre una buena influencia"


viernes, 14 de octubre de 2011

Misterpotatos

Los bigotillos y tupés del año pasado asentaron los estatutos del festival del complemento dadá. Es muy raro, pero el rollo ahora es anularse a uno mismo detrás de peinados y accesorios con más personalidad que la mayoría de sus portadores. Supongo que una vez dentro de esta vorágine te ves obligado a vestirte cada mañana como si construyeras un retrato robot: un mash up hecho a base de retazos de cosas reconocibles. Entiendo que hay que ser un tipo muy carismático para poder ir así por la vida sin parecerse a aquel entrañable E.T. disfrazado. Sin embargo, ¿qué tipo carismático querría disfrazarse así?

 La ironía es un arma de doble filo, pero puede que esta vez la granada nos haya estallado en la cara.










8 de cada 10 españoles afirma no entender por qué King África no, pero estos señores sí.

martes, 4 de octubre de 2011

Atuendo tropicales

Comentaba hace algún tiempo por aquí que la gente en verano en Madrid huía del calor muy a costa de su dignidad, y por eso me alegraba siempre de la llegada del otoño. Pero este verano me pareció muy divertido un repunte tropicalista y hawaiano en el atuendo de algunos. A la mierda el pesimismo, parecían decir, aún vemos el sol brillando sobre toda esta mierda. Que Madrid esté asentado en una meseta semidesértica a casi 400 km. del mar era algo accesorio: Tropicalia es un estado mental.

Estos días, un pensamiento aterrador me consume por dentro: Que el tropicalismo no sobrevivirá a este invierno. Que la turbiedad siempre ha acabado por imponerse en Madrid a golpe de, en fin, realidad.

Hay algo de idealista y de ingenuo en todo este mundo paradisíaco. Algo de cartónpiedra. Pero aquí sólo tenemos veinte días de otoño y se pasa del veranazo a la rasca invernal demasiado pronto. El frío que llega te recuerda cada año que las cosas son como son, y ya está ¿Por qué nadie, entonces, se ha decidido a sacar a la venta plumíferos hawaianos?

Haced la prueba: Coged al amigo con más jeto de vicioso violador, ponedle una camisa tropical y... voila! Por arte de magia se convertirá en un entrañable e irónico vividor de simpáticos vicios.





lunes, 12 de septiembre de 2011

Taitantos de libro

Si hacemos caso a los anuncios de la tele, el amo del cotarro metropolitano es un señor cuya juventud juega los últimos minutos de la prórroga en un partido que todos sabemos como termina. La publicidad, que es muy lista, sabe que este tipo de señor juvenil es el target perfecto porque es el único que no te cruza la cara cuando le hablas de "laifestail", aunque no tenga dónde caerse muerto.

A mí me parece muy bonita y muy guay la forma de juventud domesticada que viven estos señores, porque es una juventud sin sobresaltos, como los nuggets de pollo. Aclaro esto porque no todo el mundo piensa como yo. Pero qué sería de este país de envidiosos sin los bonitos y muy necesarios contrastes: Estos tipos escuchan canciones de grupos que cantan sin sonrojarse sobre "echar un polvo" o "meterse unas rayas", celebrándolo como pequeñas victorias, mientras se ríen de chavales jóvenes que follan y se drogan a diario y preferirían pillarse un SIDA a acabar pareciéndose a un señor como estos.





Os lo creáis o no, en algunas culturas se considera a este tipo "un partidazo"

viernes, 2 de septiembre de 2011

Los ángeles de Ratzy

Se dice que la curia tuvo una revelación viendo las noticias: Los jóvenes tuneados salen en la tele. Y es que a los medios les gustan las cosas claras y necesitan uniformar antes de informar. Primero nos vendieron el look comepipas de un 15M que murió de falta de sentido estético. Un par de meses después, nos explicaron que los chavalillos ingleses ya no eran pelirrojos meripopinescos sino infectados con capucha extraídos de 28 días después (preparáos para ver una invasión hoodie en la MTV en los próximos meses... )

Para combatir esta insana imagen que la juventud, divino tesoro, ofrecía al mundo, la élite vaticana reclutó un ejército de mozas y mozos enfundados en brillantes colores y azúcar glas. Los armó con canciones y consignas y un erotismo de campamento perfectamente prediseñado y los lanzó a soportar el verano más torrador de Europa con la misión de mostrar cacho católico y enseñar a los indignados que se están perdiendo una gran fiesta. Y amén que se la están perdiendo: Os puedo asegurar que si hubieran exhibido más carne, a día de hoy todavía estarían saliendo por la tele.



...y  fue así como el look "jugadora de baloncesto" quedó irremediablemente unido a la iconografía cristiana.

sábado, 29 de enero de 2011

Mundo blogger

Una de las aficiones que he desarrollado este año es vagar sin rumbo por el mundo con Google Earth, hacerme consciente de las dimensiones de nuestro planeta y buscar los lugares más recónditos para explorarlos y perderme en ellos. No necesito viajar físicamente; el hecho de saber que tales lugares existen me reconforta. Desconozco el nivel de fiabilidad de Google Earth, pero soy feliz ignorándolo, y no necesito saberlo, porque en mi búsqueda de realidad, en el fondo sólo estoy huyendo de ella. También leo algunos blogs. El mundo blogger es mucho más granhermanesco que cualquier otro campo de la expresión humana. Un blogger no necesita trayectoria, coherencia o rigor para ser encumbrado rápidamente. Basta con que le lean. Ser escritor es más difícil. Ser músico o fotógrafo es más difícil. Por eso tanta gente escribe blogs. El 95% de ellos aseguran tratar de la realidad y en el fondo son sólo el traje en el que alguien se enfunda para que otros le escuchen. Su realidad está  convenientemente distorsionada.
A veces vago por blogs como lo hago por Siberia o Tierra de Fuego. Sabiendo que son artificios. Pero me tranquiliza saber que hay gente dispuesta a mentir por entretenerme, aunque sea a cambio de mi admiración. Si quisiera conocer gente interesante me iría de viaje.
La cosa va así: Te inventas un yo que mola, pierdes un rato pensando un par de frases con gancho y finges que exponerte públicamente es una necesidad de tu alma. Bendito internet.

jueves, 6 de enero de 2011

Diseñadores plastazo

Si alguno de vosotros es tan friki como yo, tendrá, o habrá tenido en su catálogo de amistades un guitarrista pajero y un diseñador plastazo. Ambos son caras de la misma moneda: La que evalúa el mundo en función de su complejidad, siendo incapaces de ver aspectos mil veces más importantes que este, como la ingenuidad o la frescura.
Y es que a través de la gafas de un diseñador plastazo, el mundo es un lugar siempre mejorable a golpe de catálogo tipográfico y texturas de Photoshop. Todo lo analiza, todo lo critica y todo lo hubiera hecho él mejor poniendo en práctica lo aprendido en el foro el día anterior. Curiosamente, las creaciones del diseñador plastazo suelen permanecer ocultas bajo siete llaves, lo que me lleva a pensar si su gran obra no será, precisamente, abrir los ojos al mundo ante la falta de talento de los demás. 

Un apunte: El merchandising con referencias  a basurilla de los ochenta sólo funciona si tú mismo pareces una basurilla de los ochenta. ¿Te imaginas a Jarvis Cocker con una camiseta de "El Trueno Azul"? Pues eso.


¿De verdad dejeríais que un tipo así os diera lecciones sobre algo?